lunes, 12 de septiembre de 2011

Capítulo 16. (Parte 2)







–Adiós… –me obligué a decirle. ¿Adiós? El beso me había dejado tonta. No quería irme, pero tenía que hacerlo por el bien de Nicole–. Me tengo que ir. Gracias, Johnny. Por todo. De verdad –susurré–. Pero no estaría mal pasar otro rato a solas contigo. –Sonrió. Quizás una proposición muy atrevida para mí. No tenía tiempo de buscar otra indirecta, menos directa, para decirle que me volviera a besar.



Johnny me atrajo hacia sus rodillas, me sentó sobre ellas y besó mis labios dulcemente. No quería irme. Me miró a los ojos y me ayudó a levantarme. Sus manos me trataban con delicadeza. Como si fuera una frágil muñeca de porcelana.



–Adiós, mi niña –susurró en tono cariñoso. Sonreí. Me había puesto un apodo afectivo. Me encantaba. Era dulce, bonito y… perfecto. Me estaba retrasando demasiado.



Afortunadamente, el camarote de Derek estaba enfrente del de Johnny. Llamé a la puerta.



–¿Quién es? –preguntó una voz rota y adormilada. Se veía que a él, tampoco le había sentado bien lo de cortar.



–Soy Sandy –dije, pensando si debería haber mentido. Nadie suele tener ganas de hablar con la prima/mejor amiga de una ex. Sin embargo, Derek me abrió la puerta con toda naturalidad del mundo. Como si hubiese sido Johnny o cualquier otra persona. Y allí estaba él, parado, con un pijama de pantalón y manga corta del pato Lucas. Entre la cara de sueño que tenía, la marca que, supuse, le habría producido los dobleces de la almohada y ese conjunto, estaba bastante gracioso.



–Entra –dijo mirándose de arriba abajo. El camarote estaba muy desordenado. Los guerreros no tenían que compartirlo, pero, de ser así, no habría podido entrar del estropicio.



–Derek, quería hablar contigo sobre lo de Nicole. –No podía irme por las ramas. Además, él sabía a qué había venido.



–Yo también quería hablar contigo, Sandy. –Eso sí que no me lo esperaba. Creía que me echaría o diría algo como: “Estoy ocupado, déjame en paz. No tengo nada de qué hablar”.



–Ah, ¿sí? –pregunté visiblemente sorprendida.



–Sí. Tú conoces a Nicole mejor que nadie. Oí que me engañaba con Barney y no lo creí. Hasta que lo vi con mis propios ojos. Pero me sigue gustando, la sigo queriendo y quiero saber por qué. –No sé quién le había dicho semejante estupidez. Tenía fe ciega en las palabras de mi prima e intentaría que Derek se fiara de mi palabra. Él la quería, al igual que ella a él. Las cartas que había sobre la mesa estaban a mi favor. Tenía una buena mano con la que ganar.



–Derek, vine a decirte que Nicole no te engañó. No sé lo que vistes, pero debes saber que, a pesar de que Barney intentara cautivarla, ella le dio calabazas en el primer momento. Lo sé porque me lo dijo. Y confío en ella. Le gustas mucho, eso no hace falta que te lo diga –dije con una delgada sonrisa en el rostro–. Se ha pasado toda la noche llorando. Créeme. Confía en ella. Para Nicole no eres un cualquiera. Nunca la había visto así. Ella te quiere, por encima de todo. Lo vuestro fue, el tan mítico y famoso, amor a primera vista –expliqué. Si me costaba ser clara y mostrar mis sentimientos, hacerlo con los de Nicole, era mucho más difícil.



–No sé, Sandy. Lo que vi… –susurró–. Ella estaba… Además, Evan me dijo… –Eso lo explicaba todo. ¿Qué ganaba con esto? Me había demostrado que era feliz jodiendo a los demás. “He tenido mucha paciencia contigo y tu prima”, recordé. A eso se refería.



–Para. –Derek me observó intrigado–. Evan –repetí–. Todo esto es por su culpa. Te ha hecho ver lo que él quería que vieras.- Solo el tenue recuerdo de su silueta pegándose a mi cuerpo me debilitaba. Hacía que el miedo sentido anteriormente, se apoderara de mí.



–Sandy, ¿qué te pasa? Estás temblando. –Tenía razón. Volvía a temblar. Intenté controlarme. Tenía que explicarle qué había sucedido.



–Evan intentó violarme. Johnny llegó y él se marchó. –El rostro de Derek se mostró contrariado ante mi revelación. Estaba sorprendido. Instantes después, se movía por todo el cuarto en busca de ropa limpia.



–Veo que Evan la ha tomado con vosotras –dijo volviéndose hacia mí–. Si es verdad lo que dices, tendremos que encargarnos de él…

1 comentario:

  1. WoowW Esto está más emocionante de lo que creía! Y qué romántica la escena del beso. Me encanta guapísimaa *-*

    TeeQuieroo C:


    DaFF.

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